Introducción: Los 9 dones del Espíritu Santo
El tema de los dones espirituales ha fascinado a los creyentes desde los tiempos de la iglesia primitiva hasta nuestros días. El apóstol Pablo, en su primera carta a los Corintios, capítulo 12, nos presenta una lista de 9 dones sobrenaturales que el Espíritu Santo concede soberanamente a la iglesia. Estos dones no son talentos humanos ni habilidades naturales, sino manifestaciones divinas que trascienden lo ordinario, confirmando la presencia y el poder de Dios en medio de su pueblo.
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El propósito de este estudio es profundizar en el entendimiento de cada uno de los dones, su importancia, cómo operan, y de qué manera edifican al Cuerpo de Cristo. También reflexionaremos sobre el equilibrio necesario en su uso y cómo deben estar siempre sujetos al amor y a la dirección del Espíritu Santo.
Los 9 Dones del Espíritu Santo según 1 Corintios 12:8-10
Pablo declara:
«Porque a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia según el mismo Espíritu; a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu. A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas.» (1 Corintios 12:8-10)
Los 9 dones del Espíritu Santo pueden agruparse en tres categorías principales:
- Dones de revelación: Palabra de sabiduría, palabra de conocimiento, discernimiento de espíritus.
- Dones de poder: Fe, dones de sanidades, hacer milagros.
- Dones de inspiración o vocales: Profecía, diversos géneros de lenguas, interpretación de lenguas.
Este orden nos ayuda a comprender mejor su función y cómo el Espíritu los utiliza para glorificar a Cristo.
1. Palabra de Sabiduría
La palabra de sabiduría es uno de los dones más preciosos, porque nos permite aplicar el conocimiento divino en situaciones específicas de la vida. No debemos confundirla con la sabiduría humana o con la experiencia adquirida a través de los años. Se trata de una revelación sobrenatural que procede del Espíritu Santo, para traer dirección clara y precisa en momentos cruciales.
Este don se activa cuando la lógica humana y la razón no bastan para resolver un problema, y se necesita la intervención directa de Dios.
Ejemplos bíblicos
- Esteban ante el concilio (Hechos 6:9-10). Dice la Escritura que “no podían resistir a la sabiduría y al Espíritu con que hablaba”. El don de sabiduría operaba en Esteban, dándole palabras que ningún opositor podía refutar.
- El Concilio de Jerusalén (Hechos 15:13-21). Cuando había gran debate sobre la circuncisión y la ley, Jacobo se levantó y dio una palabra de sabiduría que trajo claridad y dirección al cuerpo de Cristo, resolviendo un conflicto que podía dividir a la iglesia primitiva.
Aplicaciones prácticas
La palabra de sabiduría permite a la iglesia:
- Dar soluciones divinas en momentos de crisis, cuando no hay salidas humanas visibles.
- Mostrar el camino correcto cuando parece no haber salida, evitando decisiones equivocadas.
- Confirmar la voluntad de Dios en decisiones importantes, como en el liderazgo, el ministerio o la vida personal.
Importancia: este don es vital para el liderazgo cristiano, pues evita que la iglesia se mueva por impulsos carnales o por la mera lógica, y la mantiene alineada con la mente de Cristo.
2. Palabra de Conocimiento
La palabra de conocimiento es una revelación sobrenatural de hechos presentes o pasados que el creyente no podría conocer de manera natural. No se trata de intuición, sospechas o adivinación, sino de una información clara que Dios da para cumplir un propósito específico. Es como si Dios abriera una ventana espiritual para mostrar lo oculto.
Este don revela que Dios conoce perfectamente a cada persona, su historia y sus circunstancias, y que se interesa en ellas de manera personal.
Ejemplo bíblico
Pedro con Ananías y Safira (Hechos 5:1-11): Pedro discernió por el Espíritu el engaño de ambos. Nadie le contó, sino que fue una revelación sobrenatural. Este ejemplo muestra cómo el don de ciencia operaba para preservar la santidad en la iglesia.
Aplicaciones prácticas
La palabra de conocimiento sirve para:
- Desenmascarar el pecado oculto y evitar que el enemigo destruya la vida de alguien.
- Traer consuelo mostrando que Dios conoce hasta los detalles más íntimos de la vida de una persona.
- Confirmar la obra de Dios en una situación determinada, fortaleciendo la fe.
Importancia: este don manifiesta la omnisciencia de Dios, abre puertas para la evangelización y también es un canal poderoso de sanidad interior, porque cuando alguien experimenta que Dios lo conoce profundamente, su corazón se abre al arrepentimiento y a la fe.
3. Fe
La fe como don del Espíritu es distinta de la fe salvadora que todo creyente recibe al aceptar a Cristo. Se trata de una confianza sobrenatural, impartida por el Espíritu Santo en momentos específicos, para creer por lo imposible, descansar en el poder de Dios y avanzar sin dudar aun en circunstancias adversas.
La Biblia enseña que sin fe es imposible agradar a Dios (Hebreos 11:6). Sin embargo, este don va más allá de la fe común. Es una porción extraordinaria de fe que habilita al creyente para esperar milagros y actuar con la seguridad de que Dios lo respaldará.
Ejemplos bíblicos
- Pablo y Silas en la cárcel de Filipos (Hechos 16:25-34): Cantaban y oraban, aun en cadenas y azotes. Dios abrió las puertas milagrosamente y el carcelero y su familia fueron salvados, demostrando fe sobrenatural para esperar la intervención de Dios.
- Los apóstoles liberando enfermos (Hechos 3:1-10): Pedro y Juan mostraron fe para ordenar a un cojo que caminara, confiando en el poder sobrenatural de Cristo a través de ellos.
Aplicaciones prácticas
La fe como don permite:
- Creer en milagros imposibles, como la provisión en medio de la escasez o la sanidad en casos desesperados.
- Inspirar a otros a confiar en Dios, porque la fe es contagiosa y fortalece a la iglesia.
- Sostener a la iglesia en tiempos de prueba, manteniéndola firme cuando todo parece derrumbarse.
Importancia: este don es una fuerza impulsora que abre la puerta a las demás manifestaciones de poder, como los milagros y las sanidades. Sin fe, los demás dones no pueden operar con plenitud.
4. Dones de Sanidades
Los dones de sanidades son manifestaciones sobrenaturales a través de las cuales Dios restaura la salud física, emocional y espiritual de las personas. Pablo los menciona en plural, lo cual indica que existen diversas formas y dimensiones en que este don puede operar. No se trata de la habilidad médica ni de la experiencia humana en el cuidado de la salud, sino de una obra directa del poder de Dios.
La sanidad divina es parte del plan redentor de Cristo. Isaías profetizó: “Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores” (Isaías 53:4). Jesús mismo, durante su ministerio terrenal, sanaba a toda clase de enfermos, demostrando que la sanidad es una expresión de la compasión de Dios hacia los que sufren.
Ejemplos bíblicos
Las sanidades en manos de los apóstoles (Hechos 5:12-16): Todos los enfermos eran traídos y sanados; se manifestó el poder sobrenatural para confirmar el mensaje del evangelio.
Aplicaciones prácticas
Los dones de sanidades:
- Revelan la compasión de Dios hacia los que sufren, mostrando que Él se interesa en nuestro bienestar integral.
- Confirman la predicación del evangelio, pues las señales acompañan a la Palabra predicada (Marcos 16:17-18).
- Abren corazones endurecidos a la fe, ya que muchos creen al ver la obra milagrosa de Dios.
Importancia: este don sigue vigente hoy y es necesario en un mundo lleno de enfermedades. La iglesia debe orar con fe, creyendo que Jesús es el mismo ayer, hoy y por los siglos.
5. Hacer Milagros
El don de hacer milagros es la intervención sobrenatural en las leyes de la naturaleza para manifestar el poder de Dios. Mientras que los dones de sanidad se centran en la restauración de la salud, los milagros abarcan un campo mucho más amplio: provisión sobrenatural, liberación, protección, e incluso autoridad sobre la naturaleza.
Un milagro trasciende lo natural y solo puede explicarse como obra directa de Dios. Cuando ocurre, no deja lugar a dudas de que el Señor ha intervenido de manera gloriosa.
Ejemplos bíblicos
- Pedro y Juan en la puerta del templo (Hechos 3:1-10). Un hombre cojo desde nacimiento fue sanado instantáneamente al ser tomado de la mano. Esa sanidad abrió la puerta para que multitudes escucharan el evangelio.
- Pablo en Listra (Hechos 14:8-10). Al ver la fe de un paralítico, declaró: “Levántate derecho sobre tus pies”, y el hombre fue sanado al instante.
Aplicaciones prácticas
El don de milagros:
- Muestra la soberanía de Dios sobre la creación, recordándonos que Él es el Creador que tiene control sobre todo.
- Rompe las cadenas de la opresión satánica, como en el caso de liberaciones de demonios.
- Fortalece la fe de la iglesia y provoca que los incrédulos se rindan ante la evidencia del poder de Dios.
Importancia: este don despierta la expectativa de lo imposible y nos recuerda que el evangelio no es solo palabra, sino poder de Dios (1 Corintios 4:20).
6. Profecía
La profecía es uno de los dones más mencionados en el Nuevo Testamento. Pablo la presenta como un don de inspiración que tiene como fin edificar, exhortar y consolar a la iglesia (1 Corintios 14:3). No debe entenderse únicamente como predicción del futuro, sino como comunicación inspirada por el Espíritu Santo para transmitir la voluntad de Dios.
Este don puede manifestarse en un mensaje breve en un culto congregacional, en una exhortación personal o incluso en una revelación que anuncia eventos futuros. Lo esencial es que siempre debe estar en armonía con la Palabra de Dios y nunca contradecir las Escrituras.
Ejemplos bíblicos
- Agabo (Hechos 11:27-30). Profetizó una gran hambre que vendría sobre toda la tierra, lo cual permitió que la iglesia se preparara y ayudara a los hermanos en necesidad.
- La iglesia en Corinto, donde se animaba a que dos o tres profetizaran y los demás juzgaran (1 Corintios 14:29), mostrando que la profecía debía ejercerse con orden y discernimiento.
- Hijas de Felipe (Hechos 21:8-9): Cuatro hijas profetizaban, edificando la iglesia local con mensajes inspirados por Dios.
Aplicaciones prácticas
La profecía se caracteriza por:
- Edificar la fe de la iglesia, trayendo dirección clara de parte de Dios.
- Exhortar con amor, llamando al arrepentimiento o corrigiendo actitudes.
- Consolar a los afligidos, mostrando que Dios no ha olvidado a su pueblo.
Importancia: la profecía mantiene a la iglesia sensible a la voz del Espíritu Santo. Sin embargo, debe ser probada y discernida, ya que no todas las voces provienen de Dios.
7. Discernimiento de Espíritus
El discernimiento de espíritus es la capacidad sobrenatural dada por el Espíritu Santo para distinguir si una manifestación, enseñanza o experiencia espiritual proviene de Dios, del ser humano o de un espíritu maligno. En un tiempo donde abundan falsas doctrinas, engaños y manifestaciones que aparentan ser de Dios, este don es absolutamente esencial para la iglesia.
No debemos confundir este don con la sospecha, la crítica, la intuición humana o la experiencia adquirida. El discernimiento espiritual es una revelación directa del Espíritu Santo que permite ver lo que está oculto detrás de lo visible.
Ejemplos bíblicos
- Pablo en Filipos (Hechos 16:16-18). Una joven poseída por un espíritu de adivinación seguía a Pablo y a sus compañeros, proclamando: “Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de salvación”. Aunque parecía correcto lo que decía, Pablo discernió que no provenía de Dios, sino de un demonio, y lo expulsó en el nombre de Jesús.
- Pedro y Simón el mago (Hechos 8:18-23): Pedro discernió que Simón quería comprar el poder del Espíritu, revelando su corazón y confrontando la intención maligna.
- Pablo y Elimas el mago (Hechos 13:8-12): El apóstol reconoció la oposición espiritual y reprendió a Elimas, demostrando discernimiento sobrenatural que protege la misión de la iglesia.
Aplicaciones prácticas
El discernimiento de espíritus:
- Protege a la iglesia de falsas doctrinas y maestros, evitando que el rebaño sea engañado.
- Expone al enemigo cuando este intenta disfrazarse como ángel de luz.
- Guía a los líderes en decisiones delicadas, mostrando si algo realmente proviene del Espíritu Santo o no.
Importancia: este don es urgente en la iglesia actual, pues estamos en tiempos donde lo verdadero y lo falso se mezclan. Solo a través del discernimiento espiritual podemos mantenernos firmes en la verdad.
8. Diversos Géneros de Lenguas
El don de diversos géneros de lenguas consiste en hablar sobrenaturalmente en idiomas que el hablante no conoce de manera natural, ya sean lenguas humanas o celestiales. Este don es una manifestación clara del Espíritu Santo, que conecta al creyente con lo divino de una manera especial.
El hablar en lenguas es un tema que ha generado debates, pero la Biblia lo presenta como un don legítimo, vigente y edificante. Pablo mismo declaró: “Doy gracias a Dios que hablo en lenguas más que todos vosotros” (1 Corintios 14:18).
Ejemplos bíblicos
- El día de Pentecostés (Hechos 2:1-11). Los discípulos comenzaron a hablar en otras lenguas, y los extranjeros que estaban en Jerusalén escucharon las maravillas de Dios en sus propios idiomas. Este evento marcó el inicio de la iglesia.
- La casa de Cornelio (Hechos 10:44-46). Mientras Pedro predicaba, el Espíritu Santo descendió sobre todos los oyentes, y comenzaron a hablar en lenguas y a magnificar a Dios.
- Los discípulos en Éfeso (Hechos 19:6). Al ser bautizados en el nombre de Jesús y recibir la imposición de manos de Pablo, hablaron en lenguas y profetizaron.
Aplicaciones prácticas
El don de lenguas cumple diversas funciones:
- Señal para los incrédulos (1 Corintios 14:22), mostrando la realidad sobrenatural del evangelio.
- Edificación personal (1 Corintios 14:4), ya que al hablar en lenguas el creyente ora directamente a Dios y fortalece su espíritu.
- Adoración profunda en un nivel donde la mente natural no alcanza, permitiendo al Espíritu interceder de manera perfecta.
Importancia: este don es un canal poderoso de oración, adoración y comunión con Dios. Aunque puede ser malinterpretado, cuando se ejerce con orden y en dependencia del Espíritu, edifica tanto al individuo como a la iglesia.
9. Interpretación de Lenguas
La interpretación de lenguas es el don sobrenatural mediante el cual el Espíritu Santo capacita a una persona para entender y comunicar el mensaje dado en lenguas en un contexto congregacional. No se trata de una traducción literal palabra por palabra, sino de una interpretación inspirada que transmite el sentido del mensaje.
Este don es complementario al de lenguas y es indispensable en los cultos públicos para que la iglesia reciba edificación. Pablo enseña claramente que si en una reunión alguien habla en lenguas en voz alta, debe haber interpretación para que todos entiendan y sean edificados (1 Corintios 14:27-28).
Ejemplos bíblicos
- Aunque en el Nuevo Testamento no se narran ejemplos extensos de interpretación en acción, sí se establecen las normas en 1 Corintios 14. Pablo enseña que el hablar en lenguas en público sin interpretación no edifica, pero cuando hay interpretación, equivale a una profecía clara para todos.
- En la experiencia práctica de la iglesia, muchas veces alguien habla en lenguas, y otra persona (o incluso la misma) recibe del Espíritu la interpretación para edificación del cuerpo.
Aplicaciones prácticas
La interpretación de lenguas:
- Evita la confusión en la congregación, ya que transforma un mensaje incomprensible en una palabra clara.
- Edifica la fe de los oyentes, porque entienden lo que Dios está comunicando.
- Confirma la obra del Espíritu Santo, mostrando que el mover de lenguas no es desorden, sino una expresión genuina de Dios cuando se acompaña de interpretación.
Importancia: este don recuerda que Dios no es un Dios de confusión, sino de paz. Trabaja en perfecta armonía con el don de lenguas para edificar al Cuerpo de Cristo.
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Los 9 dones estudiados son manifestaciones del Espíritu Santo
Al estudiar los nueve dones espirituales, comprendemos que todos ellos son manifestaciones del Espíritu Santo para la gloria de Cristo y la edificación de la iglesia. No son trofeos personales ni herramientas para exhibición, sino expresiones de la gracia divina.
Cada don cumple una función específica:
- Los dones de revelación (sabiduría, conocimiento, discernimiento) iluminan lo oculto.
- Los dones de poder (fe, sanidades, milagros) manifiestan la autoridad de Dios sobre lo imposible.
- Los dones de inspiración (profecía, lenguas, interpretación) comunican mensajes divinos para edificación y dirección.
Todos los dones deben ejercerse con amor, humildad y bajo la dirección del Espíritu Santo. Pablo recuerda que el amor es el camino más excelente (1 Corintios 13).
Propósito General de los Dones
La afirmación paulina —“a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho” (1 Corintios 12:7)— no es una nota al pie ni un añadido: es la clave hermenéutica para entender por qué existen los dones. Los 9 dones del Espíritu Santo no son fines en sí mismos; son medios. Profundicemos qué significa cada objetivo y cómo se ve su concreción en la vida de la iglesia.
Cinco propósitos de los 9 dones del Espíritu Santo
1. Edificar el Cuerpo de Cristo
- Exégesis bíblica: La palabra griega oikodomé (edificación) aparece repetidamente en 1 Corintios 14 y en Efesios 4:11-13. Los dones que se manifiestan en la congregación deben contribuir a la madurez doctrinal, ética y espiritualidad de los creyentes.
- Resultado concreto: una iglesia edificada es una iglesia que crece en doctrina, en amor y en fruto (no sólo en números). Por ejemplo, la profecía trae instrucción y ánimo; la enseñanza sana la doctrina; las sanidades abren puertas evangelísticas, pero todo con el objetivo de formar creyentes estables.
- Medida práctica: mide un ministerio por los frutos a mediano plazo (conversión, perseverancia, fruto de vida santa), no por la espectacularidad del evento.
2. Animar y consolar a los creyentes
- Fundamento bíblico: 1 Corintios 14:3 define la profecía como “para edificación, exhortación y consuelo”. Esto supone que la manifestación espiritual debe tener un efecto pastoral: calmar el miedo, confirmar la esperanza, reparar heridas.
- Ejemplo práctico: una palabra profética que trae ánimo en medio del duelo o una sanidad que restaura la confianza de quien llevaba tiempo enfermo.
3. Glorificar a Dios
- Idea central: todo don apunta a mostrar la gloria de Cristo. Cuando el don se usa para engrandecer a la persona que lo posee, se desvirtúa. Jesús dijo: “para que Dios sea glorificado” (Juan 14:13-14).
- Indicador pastoral: ¿la reacción de la congregación es dirigir la mirada a Cristo o al ministro? El objetivo legítimo es que Dios sea honrado.
4. Confirmar la predicación del evangelio
- Base bíblica: “las señales seguirán a los que creen” (Marcos 16:17-20; Hechos 2; Hechos 3). Las señales no sustituyen la palabra, pero la acompañan como autenticación en contextos donde la gente no conoce la Palabra.
- Aplicación: al predicar, la oración por los enfermos o el ejercicio de dones puede confirmar el mensaje —pero cuidado: la confirmación no sustituye al discipulado y a la enseñanza sólida.
5. Alcanzar a los incrédulos
- Función misionera: la manifestación de poder o de revelación puede atraer curiosidad que lleve a la conversión (Pentecostés, Hechos 2).
- Precaución: el objetivo evangelístico exige que el asombro por el signo sea seguido por una presentación clara del evangelio y una comunidad que acompañe al nuevo convertido.
Los Dones y el Amor
Pablo introduce el capítulo 13 en medio de la discusión sobre dones no por casualidad sino para restablecer la prioridad moral y relacional de toda manifestación del Espíritu.
El amor en el uso de los 9 dones del Espíritu Santo
1. Amor como criterio ético y teológico
- Argumento central: los dones sin amor son ruido (1 Corintios 13:1-3). Un don, por más espectacular, que no construye en amor es inútil.
- Características del amor según 1 Corintios 13: paciencia, bondad, humildad, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor, no se alegra de la injusticia. Estos rasgos deben permear el ejercicio de los dones.
- Implicación: el fruto (amor) regula el uso de los dones. Un ministerio con dones abundantes pero sin fruto moral es un ministerio problemático.
2. Permanencia: amor > dones
- Teología práctica: los dones son temporales en su manifestación; el amor permanece. Por eso la meta no es maximizar manifestaciones, sino formar personas que aman y sirven.
- Consecuencia eclesial: priorizar la formación en carácter (santidad, humildad, servicio) tanto como la impartición de dones.
3. Amor y autoridad pastoral
- Liderazgo que ama: los líderes que ejercen autoridad deben hacerlo desde el amor que sirve, no desde la dominación. La práctica pastoral del discernimiento y la corrección debe ser motivada por amor restaurador.
Equilibrio y Responsabilidad en el Uso de los Dones
Uno de los mayores desafíos de la iglesia del primer siglo —y también de la iglesia actual— ha sido mantener un equilibrio sano entre la libertad del Espíritu y el orden en la congregación. El apóstol Pablo dedicó tres capítulos completos (1 Corintios 12–14) a orientar a los creyentes de Corinto sobre cómo manejar los dones espirituales de forma edificante.
Equilibrio entre la libertad del Espíritu Santo y el orden
1. El peligro del desorden espiritual
La iglesia de Corinto tenía abundancia de dones, pero también abundancia de problemas: división, carnalidad, falta de amor y competencia espiritual. Muchos querían resaltar con sus manifestaciones, pero se olvidaban del propósito supremo: edificar a los demás.
- El desorden genera confusión. Pablo dice: “Dios no es Dios de confusión, sino de paz” (1 Corintios 14:33). Cuando los dones se ejercen sin dirección, los visitantes pueden escandalizarse o incluso alejarse.
- El desorden desplaza el evangelio. Cuando lo espectacular ocupa el centro, la predicación de Cristo crucificado pasa a segundo plano.
2. Principios bíblicos de responsabilidad
Pablo estableció tres principios que siguen siendo vigentes:
- Decentemente y con orden (1 Corintios 14:40). El orden no es apagar el Espíritu, sino canalizarlo.
- Discernimiento comunitario. Toda profecía debe ser juzgada por los demás (1 Corintios 14:29). Esto significa que nadie tiene el monopolio de la verdad espiritual; todos necesitamos corrección y confirmación.
- La gloria solo es para Dios. Cuando un don exalta al hombre más que a Cristo, se ha desviado de su propósito. El Espíritu Santo nunca compite con la centralidad de Jesús.
3. La responsabilidad del creyente
Quien recibe un don tiene una triple responsabilidad:
- Mantener pureza de corazón. El Espíritu no usa vasos perfectos, pero sí busca vasos limpios. La santidad personal protege al creyente de abusar del don.
- Someterse al liderazgo espiritual. No hay manifestación espiritual que esté por encima de la autoridad bíblica establecida en la iglesia.
- Ejercer los dones con humildad. Recordar que el don no es propiedad privada, sino un regalo para servir.
4. Ejemplos históricos
A lo largo de la historia de la iglesia, los excesos en el uso de los dones han producido movimientos caóticos, pero también la corrección ha traído avivamientos duraderos.
- En el avivamiento pentecostal de Azusa Street (1906), había manifestaciones poderosas, pero también se estableció un fuerte énfasis en la humildad y en la centralidad de Cristo.
- En contraste, otros grupos que buscaron solo experiencias sobrenaturales sin doctrina sólida terminaron fragmentados.
El equilibrio es clave: sin el fuego del Espíritu, la iglesia se enfría; pero sin el orden bíblico, el fuego se descontrola y destruye.
Aplicación Práctica para la Iglesia de Hoy
Los dones no son reliquias del pasado, sino herramientas divinas para la misión actual. En un mundo lleno de incredulidad, religiosidad vacía y sufrimiento, la iglesia necesita tanto el poder como la sabiduría del Espíritu Santo.
Los 9 dones del Espíritu Santo: Aplicación en la iglesia de hoy
1. Los dones en el contexto contemporáneo
- En la evangelización: los dones de sanidad y milagros abren puertas en lugares donde la gente rechaza la religión tradicional, pero responde al poder de Dios manifestado.
- En el discipulado: la palabra de sabiduría y de conocimiento ayuda a aconsejar a los creyentes en decisiones difíciles.
- En la adoración comunitaria: la profecía y la interpretación de lenguas traen dirección fresca de parte de Dios.
2. Cómo cultivar una iglesia sensible a los dones
- Oración constante: pedir al Espíritu que distribuya los dones como Él quiere (1 Corintios 12:11).
- Enseñanza bíblica sólida: sin una base doctrinal clara, los dones se convierten en espectáculo.
- Ambiente de amor y unidad: donde hay celos, rivalidades o división, los dones se contaminan.
3. El impacto de una iglesia llena del Espíritu
Una iglesia que permite la manifestación de los dones de manera responsable:
- Vive en poder sobrenatural, confiando en Dios más que en métodos humanos.
- Manifiesta la gloria de Dios, mostrando que Cristo sigue obrando hoy.
- Da testimonio al mundo de que Jesús está vivo, lo cual atrae a los perdidos.
4. Llamado a cada creyente
Los dones no son exclusivos de pastores o líderes. Cada miembro del cuerpo de Cristo puede ser usado. Lo que se requiere es disponibilidad, fe y obediencia al Espíritu Santo.
Conclusión: Los 9 dones del Espíritu Santo según la Biblia
Los 9 dones del Espíritu Santo son un recordatorio de que la iglesia no camina sola ni con fuerzas humanas. Cada don refleja un aspecto del carácter y del poder de Dios. Pero todos convergen en un mismo fin: exaltar a Cristo y edificar su iglesia.
La exhortación de Pablo sigue vigente: “Procurad los mejores dones” (1 Corintios 12:31) y “Anhelad los dones espirituales, pero sobre todo que profeticéis” (1 Corintios 14:1). El desafío es mantener el equilibrio entre poder y amor, entre libertad y orden, entre lo espectacular y lo edificante.
Así, la iglesia de hoy podrá experimentar un avivamiento genuino, no solo de emociones, sino de transformación duradera, donde Cristo es glorificado y el mundo es alcanzado.